Netvalue elabora y ratifica informes sobre derivados financieros como contratos de permutas financieras (swaps). Netvalue forensic cuantifica aspectos técnicos como el coste de cancelación que tiene para las partes en cada momento del contrato o si se comporta como cobertura o de forma especulativa.
Los derivados financieros como su nombre indica son productos que derivan de otros productos financieros. En definitiva los derivados no son más que hipotéticas operaciones que se liquidan por diferencias entre el precio de mercado del subyacente y el precio pactado.
Dicho esto y pensando en lo que conceptualmente es un derivado, es fácil suponer que pueden existir tantos derivados financieros como operaciones financieras reales o ficticias se puedan realizar. Así estos tipos de derivados no están regulados por una cámara de compensación sino que son las partes quienes proceden a su liquidación en la fecha de vencimiento.
De cara a la contratación de estos productos y dado que cada operación tiene una serie de características particulares lo habitual es firmar un contrato marco, “Contrato Marco de Operaciones Financieras” o más abreviadamente CMOF, elaborado por la AEB firmándose posteriormente un pliego de condiciones particulares para cada operación contratada (“Confirmación”).